Este millonario can dado a la fuga, en realidad se llama Cook y vive en un pueblo entre Madrid y Guadalajára con su dueño y adiestrador Antonio Valor, quien se encarga de prepararle para todas sus actuaciones ante la cámara.
Pancho aún tiene un largo futuro como actor, ya que tiene un contrato de exclusividad en publicidad, trabaja en series televisivas y quien sabe, a lo mejor algún día da un salto a la gran pantalla.
Aquí está el vídeo que le lanzó a la fama:
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