Diamantes mandarín

Estas pequeñas aves son procedentes de Australia.

A pesar de su reducido tamaño, son muy fuertes, por lo que es una de las aves recomendadas como mascota a principiantes.

Les encanta rodearse de los de su especie ya que no paran ni un momento. Entre ellos no se aburrirán nunca y no echarán de menos nuestra presencia (al contrario que en otras aves). Por lo que si están pensando en ellos como mascota, recomiendo una parejita. En estas aves, es relativamente fácil distinguir machos de hembras, el macho suele tener los mofletes coloreados (como el de la izquierda) excepto en la variedad blanca, las hembras no tienen coloretes.

Tienen un canto muy alegre, a mi me parece hasta divertido. Y es mucho menos molesto de lo que puede resultar el de otras aves con cantos más potentes (no a todo el mundo le agrada el canto de algunas aves y les pueden resultar irritantes, pero es mejor saberlo antes de adquirirlas y así evitar el que luego no sepan que hacer con ellas).

JAULA: Cuanto más espacio tengan para volar y ejercitarse, mayor será su salud y vitalidad. Las medidas recomendables para una pareja serian: 80 cm de largo, 40 cm de ancho y 60 cm de alto.

Los complementos que deberán tener son: perchas (si son ramas naturales mejor), un nido, una bañera, comedero y bebedero. En las tiendas podemos encontrar un gran número de accesorios, pero hay que tener en cuenta, que cuantos más accesorios menos espacio tienen para moverse por la jaula (es preferible menos accesorios y más espacio, o aumentar el tamaño de la jaula).

La jaula debe estar situada a una buena altura, en una habitación iluminada pero donde no les dé el sol directo durante muchas horas, y lejos de humos y corrientes.

ALIMENTACIÓN: Ademas de los preparados específicos que se venden para ellos, se les debe dar una dieta variada en la que podemos incluir: hierbas (diente de león, perejil...), lechuga, frutas (pera, uva, kiwi, plátano,manzana...) y verduras (endivias, espinacas, pimientos, canónigos...). Pero hay que tener cuidado de no darles ninguna hoja, ni semilla, de plantas que tengamos en casa, porque algunas pueden ser venenosas para ellos.

Son buenos compañeros para charlar y contagiarse de su vitalidad, además de tener un cuidado sencillo al alcance de cualquiera.